Excavar en el pasado, con ayuda de lo que te rompió, para reconstruir tu vida.
Transformar grandes dificultades y cambios que parecían restrictivos en experiencias de profunda liberación, bienestar y sanación interior
Con agradecimiento a quienes nos permiten compartir sus historias de éxito
“Gracias por todo tu apoyo y cariño. Estoy viviendo en otro lugar y me siento muy feliz, nunca había sentido tanta libertad, paz y tranquilidad como ahora. Siento mucha gratitud Maru, que el universo te compense por todo tu trabajo a la humanidad.”
Lorena D., mujer que sufrió la pérdida de una hija adolescente, participante en las Jornadas en Salud Consciente y de sesiones en Arqueología Emocional®.
“¡Estoy viendo con mucha más nitidez! La frente no la podía mover, estaba “tiesa”, pues hoy ya gesticulo y arrugo la frente... Hay cosas que no se pueden pagar con dinero; agradezco las cosas inmensas que me has regalado.”
María del Carmen C., mujer a quien le habían retirado un tumor en el ojo derecho, quien vivió estos cambios a raíz de su trabajo en Arqueología Emocional®.
“Me impresioné al llegar a casa y ver que mi
mamá había sacado todas las cosas de
Navidad y ya las había puesto sin ayuda.”
Felipe R., hijo de mujer con artritis quien antes de su sesión en Arqueología
Emocional®, no podía hacer muchas cosas con sus manos
“Algo había que el dolor no se quitaba con nada, ni siquiera cannabis…entre ayer y hoy el dolor fue bajando poco a poco. Hoy ya casi estoy al 100.”
Pamela Z., mujer que por cinco años experimentó crisis de dolor severo, quien al atravesar por la experiencia de Arqueología Emocional® resolvió de raíz la causa detrás de su dolor de espalda.
“Ya no volvieron ni los ataques de pánico ni las crisis de ansiedad. Muchísimas gracias!!!!!
Eduardo M., joven quien antes de su trabajo de Arqueología Emocional® acababa en el hospital por motivo de estas crisis.
“Te cuento Maru que lo del alcohol, estoy impactada, ayer quise una chela y ni me la acabé, la acabé tirando… y tampoco me pasa con el vino, o sea que sí sanó por completo”.
Lourdes P., mujer quien encontró en sesiones de Arqueología Emocional®, la solución a su problema de alcohol.
“Me sentía muy desesperado y ansioso porque mi vista estaba de mal en peor y mi azúcar igual. A partir del trabajo pude resolver muchos problemas emocionales. Me siento muy agradecido y muy tranquilo, superando dificultades y de nuevo con niveles de azúcar estables.”
Homero M., hombre con diabetes, quien logró estabilizar tanto asuntos físicos como familiares, con motivo de sus sesiones en Arqueología Emocional®.
“Te reporto que hoy la piel ya se apagó. Busqué un espacio para hablar con responsabilidad…. Expresé mi solución y hoy casi estoy limpia, al 95%. Me encanta el resultado. Gracias por recordarme mi magia y por sumar la tuya a mi proceso. Te abrazo y agradezco. Muchas gracias por tu amor
Gloria D., mujer que enfrentaba las consecuencias de Herpes Zoster.
“Ayer vi cambios en su cara”
Edith M., tía de joven con Síndrome de Guillián Barrén, quien había conseguido movilizar sus piernas mediante terapia de restablecimiento, pero hasta antes de su trabajo en Arqueología Emocional® seguía con la mitad de la cara paralizada.
“Yo estoy muy agradecida contigo, Dios te bendiga siempre, me has ayudado muchísimo en dos ocasiones”
Rosario L., mujer que dejó atrás parálisis facial e imposibilidad de movimiento en manos por artritis.
“Querida Maru: Te escribo este correo muy emocionado desde mi nueva posición de trabajo. No me queda más que agradecer a la vida por ponerte en mi camino …Tienes toda mi admiración Maru, lo que haces no tiene precio, no solo en tema de empleabilidad, si no en el tema personal, me has sembrado una semilla para seguir cultivando.”
Carlos P., joven que a cuatro semanas de iniciar programa de transición laboral, consiguió empleo, con mejor posición y mejor salario que el que tenía antes de dejar su empleo corporativo por un emprendimiento fallido.
“Gracias gracias gracias … ¡¡¡infinitaaaas!! Eres una maga, transformadora de corazones y almas, logras influir en las personas tan amorosamente como solo tú lo sabes hacer. Estoy muy orgullosa de él. Gracias por ser LUZ para esta familia. Siempre te estaré infinitamente agradecida”
Mariana D., Mamá del hijo de Carlos, al saber de su oferta.
“Maru, quiero agradecerte por ayudarme a identificar lo no identificable, que de repente es lo más complejo y cuando no lo tienes identificado no sabes de donde partir... ¡gracias mil por dejarme ver lo que para mi no era visible!
Jacqueline Villegas, participante de Jornadas en Salud Consciente y de sesiones de Arqueología Emocional®.